Acción Sindical
El sindicato educativo con más representación en la escuela pública de Canarias afirma que el consejero y su equipo han incumplido la mayoría de sus compromisos y solo destaca algunos avances
La finalización del curso escolar y el inminente relevo al frente de la Consejería de Educación ofrecen la oportunidad perfecta para hacer balance de esta legislatura. ANPE CANARIAS considera decepcionante y globalmente negativa la gestión llevada a cabo por el consejero José Miguel Pérez, que ha eludido los cauces de diálogo con los sindicatos y ha incumplido muchos de sus principales compromisos.
A pesar de sus promesas de consensuar todas las medidas que afectaran al profesorado, el también vicepresidente del Gobierno optó por dirigir a golpe de publicación en el Boletín Oficial de Canarias y convertir la mesa sectorial en un trámite burocrático sin sentido. Por ese motivo, el sindicato con más representación en la escuela pública solo puede suspender su labor al frente de una de las áreas prioritarias de cualquier ejecutivo, ya que de ella depende la formación y el avance de las sociedades.
La organización, que desde las pasadas elecciones sindicales es la primera fuerza de la enseñanza pública en toda la comunidad autónoma, solo ha tenido el privilegio de ser recibida por Pérez en una ocasión. Esta falta de interés por conocer las necesidades y aportaciones del profesorado ha llevado a este sindicato a remitir numerosas misivas al consejero, con la vaga esperanza de que las leyera y actuara en consecuencia. Sin embargo, en ninguna ocasión ha recibido respuesta. Lo hizo para denunciar el abandono de las enseñanzas artísticas, que desde que pasaron de manos de cabildos y ayuntamientos a la Consejería no han emprendido el imprescindible proceso de funcionarización para dar estabilidad a los docentes, y para denunciar el trato discriminatorio hacia todos los aspirantes a la convocatoria de oposiciones del domingo. Los profesores de Canarias han sido los últimos en conocer los detalles de la convocatoria de empleo público “por la dejadez de una Consejería que llevaba en funciones más tiempo del real”, denuncia el sindicato.
Pedro Crespo, presidente de ANPE CANARIAS, considera “injustificado” el trato recibido por esta Consejería y recuerda que el sindicato sí ha mantenido su palabra de intentar alcanzar grandes acuerdos que redunden en beneficio del profesorado y, sobre todo, del sistema educativo. “A pesar de esta disposición, Pérez no ha querido escuchar las reivindicaciones de los docentes. Durante todo el último año no ha dejado de insistir en que Canarias se oponía a la LOMCE. Sigue haciéndolo, pero ese discurso es solo un discurso. La prueba más evidente es que las instrucciones del próximo curso detallan la incorporación de nuevas materias en detrimento de otras y a costa de cambios en la carga horaria de los profesionales. Ni sindicatos ni centros han sido informados de unos cambios que, con las elecciones generales a la vuelta de la esquina, pueden ser efímeros”.
Este “empecinamiento ideológico” en implantar nuevas asignaturas ha tenido repercusiones sobre muchos docentes, especialmente los de Religión, que han estado entre los más damnificados durante estos últimos años. “Se ha producido un acoso indecente hacia el profesorado de Religión, que ha visto reducida su carga horaria en sus contratos y ha tenido que luchar contra el oscurantismo en la cobertura de plazas. Estas decisiones han ido en detrimento de los derechos de estos trabajadores y del derecho de las familias a elegir la educación que reciben sus hijos”.
Además, la escasa sensibilidad del consejero se suma a la situación de discriminación laboral que sufren desde hace años los docentes canarios y que ningún consejero ha solucionado. El profesorado canario es el peor pagado de todo el Estado cuando gana en antigüedad porque no percibe sexenios, algo que sí ocurre en el resto de comunidades. “Para colmo, el Archipiélago está a la cabeza de Europa en ratio alumno profesor. Es decir, a la sobrecarga horaria se añaden aulas más pobladas”, añade Crespo. “Es verdad que la calidad no se mide solo por este parámetro, pero el deterioro continuado de las condiciones laborales incide notablemente”.
Para el presidente de ANPE CANARIAS, solo hay tres aspectos positivos en esta legislatura: la aprobación de la Ley Canaria de Educación, el encomiable trabajo de los técnicos de la Consejería, y pequeños acuerdos parciales, como las comisiones de servicios de acercamiento en la misma isla, el aplazamiento de algunas plazas de empleo público para 2016 y el programa de claustros inestables (PROMECI).
Esta ausencia de avances no es consecuencia solo de la crisis, advierte el sindicato. “Hay muchas medidas y mejoras que no están vinculadas directamente al presupuesto, pero que seguramente el consejero desconoce porque no se ha sentado con nosotros a hablar y ha incumplido sistemáticamente todos los calendarios pactados”, lamenta Crespo. “¿Cómo se explica la ineficacia y la falta de interés por publicar la primera convocatoria del concurso autonómico de traslados? ¿Y la decisión de estructurar los exámenes de las oposiciones de manera que miles de aspirantes no puedan presentarse a más de una especialidad para permanecer en las listas, tal como se había pactado? ¿O el empecinamiento en mantener las prórrogas obligatorias de los destinos provisionales y el incumplimiento del director general para negociar el sistema de constitución de las listas de empleo?”.
La organización espera que el gobierno que está a punto de conformarse tenga en cuenta lo ocurrido durante estos cuatro años y ponga al frente de Educación a alguien con voluntad negociadora. Recuerda, asimismo, que la recuperación económica de la que tanto se habla no ha llegado ni a las familias ni a la escuela pública canaria, cuyos presupuestos no se han recuperado del hachazo de la recesión económica.
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