LA JUNTA DE PERSONAL DOCENTE DE S/C DE TENERIFE DENUNCIA LA FALTA DE DIÁLOGO Y CONDENA LAS MEDIDAS DE LA CONSEJERÍA DE EDUCACIÓN

En la reunión celebrada hoy, jueves 28 de junio, la Junta de Personal Docente ha manifestado su malestar por la falta de interés y el desprecio demostrado por la Dirección General de Personal ante sus propuestas de mejora no escuchadas y rechaza enérgicamente las medidas adoptadas por la Consejería para el próximo curso escolar.

Desde el comienzo del presente curso, esta Junta de Personal Docente de Santa Cruz de Tenerife no ha cejado en su empeño de colaborar con la Administración Educativa, aportando soluciones a los graves problemas que acosan al profesorado de la enseñanza pública de Canarias.

 

Sin embargo, nuestra paciencia se ha terminado, a la vista del continuo desprecio que nos manifiesta la Dirección General de Personal desde hace varios meses. Después de solicitarle en reiterados escritos y peticiones verbales una reunión con la Comisión Permanente de esta Junta, tan sólo hemos logrado un brevísimo encuentro en el mes de marzo, que apenas nos permitió exponer “a la carrera” nuestros planteamientos.

Desde entonces, a pesar del compromiso del propio Director General por convocarnos en fechas próximas a la Semana Santa, todavía no se ha dignado concedernos ni un minuto de su apretadísima agenda oficial, ni siquiera se ha molestado en contestarnos a la batería de propuestas que le entregamos en su día.

Parece que aquellas extraordinarias dosis iniciales de talante, espíritu de diálogo, apertura y llamadas a la corresponsabilidad se le han agotado rápidamente a este equipo directivo de la Consejería, que tantas expectativas favorables despertó en nuestro cada vez más desmoralizado sector educativo.

En estos días acabamos de tener un magnífico ejemplo de cómo entiende la Consejería su obligación de negociar con los representantes legales del profesorado. En un par de sesiones apresuradas de la Mesa Sectorial, entregando los documentos objeto del debate el día anterior y sin aceptar enmiendas en sus contenidos, esta desilusionante Administración Educativa considera que ya ha cumplido, como quien despacha de mala gana un pesado e inútil trámite burocrático.

Pero esta Junta de Personal no se va a callar ante lo que creemos que es una vuelta a nuestro pasado más reciente de imposiciones, ninguneo sindical, ordeno, mando y Boletín Oficial. Las promesas iniciales del Consejero en defensa de la calidad del servicio y sus posteriores “bravatas” de insumisión al Real Decreto-Ley 14/2012 se han quedado en nada: sólo ruido mediático y, a la postre, excusas improvisadas para reducir al máximo las plantillas docentes.

Las 26 horas de permanencia obligada en el centro son un absoluto abuso de esta Consejería que obligará al profesorado de Secundaria a cumplir una jornada superior a la del resto de las Administraciones Educativas. Al final, quienes lanzaban proclamas en los periódicos y amenazaban con recursos de inconstitucionalidad (que intuimos nunca verán la luz) acabarán aplicando en Canarias los “recortes” del Gobierno del Estado para reducir más cómodamente el déficit público.

Y para colmo, pretenden engañar a la opinión pública con el vergonzante anuncio de unas medidas “paliativas” que, en la práctica, se revelarán claramente insuficientes para cubrir las auténticas necesidades de personal docente que, a partir del próximo curso escolar, padecerán nuestros centros educativos.

 

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